- Esto a raíz de un proyecto de decreto que pretende favorecer la industria nacional, pero afectaría a los EV que provienen de China y Japón.
Recientemente se supo que el Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, tiene listo un proyecto de Decreto «por el cual se modifica parcialmente el Arancel de Aduanas y se establecen contingentes arancelarios para la importación de automotores…”, que tiene como objetivo fortalecer la industria automotriz nacional, clave en el proceso de reindustrialización, promover la inversión y fortalecer los encadenamientos productivos.
A partir de tal iniciativa, el decreto crea un nuevo contingente automotor, destinado a las empresas que hacen parte del Programa de Fomento para la Industria Automotriz (Profia) y al Régimen de Transformación o Ensamble, sujeto al cumplimiento de requisitos de producción e inversión.
Sin embargo, algunos actores del sector, como la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), llaman la atención sobre el articulado de derogatorias de dicha normativa, pues se interpreta que se eliminarían los beneficios que actualmente otorga el Decreto 2051 de 2019 a la libre importación de vehículos eléctricos originarios de países con los que Colombia no tiene acuerdos comerciales, como son China y Japón, lo que implicaría un alza considerable del precio final para el comprador en Colombia.
De acuerdo con cifras de Andemos, en el acumulado año al cierre de mayo, el segmento de los vehículos híbridos y eléctricos totalizó 10.925 vehículos nuevos matriculados, lo que supone una contracción del -5,6% con respecto al mismo periodo del 2022. Es interesante advertir que actualmente las marcas chinas Zhidou, BYD y Dongfeng son las que encabezan el listado en ventas de los vehículos 100% eléctricos en Colombia.
Con ese marco de referencia, desde el gremio se advierte que restringir o eliminar los beneficios indicados en el artículo 3 del Decreto 2051 de 2019 podría obstaculizar la transición energética y limitar las opciones disponibles para los consumidores interesados en adquirir vehículos más limpios y eficientes, lo que se traduciría en un fuerte retroceso para la transición energética del sector en el país.
Aunque es ideal buscar soluciones innovadoras y sostenibles para promover el desarrollo económico y la reindustrialización del sector, Andemos considera que no se debe comprometer los avances alcanzados de transición energética del sector, donde Colombia se ha convertido en un referente regional gracias a la política de incentivos a los vehículos híbridos y eléctricos. También se debe considerar que, pese a los logros, la penetración de vehículos híbridos y eléctricos en el país es todavía muy limitada, pues no llega al 1% del total de la flota vehicular.
“Es esencial encontrar un equilibrio entre fortalecer la industria nacional y promover la transición energética hacia tecnologías limpias. Restringir los beneficios para importadores de vehículos eléctricos puede ser contraproducente, obstaculizando la adopción de vehículos más limpios y eficientes. Esto no solo contribuiría a reducir las emisiones contaminantes y mejorar la calidad del aire, sino que también podría generar empleo y desarrollo económico en el país. Es importante tener en cuenta que la transición energética es un proceso complejo que requiere una estrategia integral y coordinada entre diferentes ministerios y actores”, señala Oliverio García, Presidente de Andemos.
Fuente: autocosmos.com.co