- Cesvi precisa que aunque el salario mínimo crecio 40,1%, el sector está golpeado por una pérdida del valor adquisitivo de 12,9%
Mientras el salario mínimo mensual vigente creció 40,1%, también el costo de los vehículos y la cesta básica de respuestos subió 58%. Así lo muestra un estudio realizado por el Centro de Experimentación y Seguridad Vial (Cesvi) en Colombia para el que se tuvo en cuenta la guía de valores de Fasecolda y se tomó como base los vehículos tipo sedán más vendidos en las marcas más representativas del mercado: Renault, Chevrolet, Nissan y Mazda.
De acuerdo con el estudio, para el año 2019 el promedio de un vehículo estaba en $32 millones, mientras el salario mínimo se había fijado en $828.116. Actualmente, el promedio del valor de un auto subió a $51 millones y el salario mínimo para este año se pactó en $1.160.000. La cesta básica de repuestos también registró una alta variación, de 57,8%, si se compara el valor promedio que en 2019 estaba en cerca de $16 millones con el de 2023, que es de $25 millones.
La cesta básica de repuestos se compone por las partes central, delantera, trasera y mecánica. Al comparar el valor total de las secciones de 2019 con 2023, se registra un incremento de dos salarios mínimos mensuales legales vigentes, pasando de $3.852.500 a $6.143.750, siendo las secciones delantera y trasera las que mayor incremento representan.
Luis Horacio Figueroa, director de la unidad de Servicios de Cesvi Colombia, explica que tal incremento está justificado en la oferta insuficiente de repuestos que hay actualmente en el país, la cual ha llevado a que los valores del año 2019 crezcan con una elevada variación.
«Se puede observar que mientras en el año 2019, para adquirir un vehículo nuevo de esta gama se requería de una erogación de 39 SMMLV, en la actualidad se requiere 44 SMMLV, lo que indica una pérdida del valor adquisitivo del 12,9% en este lapso», señaló.
El estudio indica que el incremento del salario mínimo por debajo de la inflación crea una realidad de pérdida del poder adquisitivo con respecto al que se tenía años anteriores. Sumado a ello, inciden otros factores en la variación de los precios como la inflación internacional, el encarecimiento de la cadena de valor y la devaluación del peso colombiano respecto al dólar estadounidense.
Los respuestos más demandados
El estudio de Cesvi precisa que en 2019 los repuestos de la sección delantera se podían adquirir con alrededor de seis salarios mínimos, mientras que para 2023 se requieren 10. Lo mismo sucede en la sección trasera, en la que se presenta un incremento de aproximadamente 4 salarios mínimos mensuales para 2023, en comparación con 2019. Según el modelo de información (MISA), la cesta básica de Repuestos de estas secciones se componen de 23 piezas y pueden llegar a costar 50% del valor total de un vehículo nuevo.
Figueroa expone que los golpes en las secciones delanteras y traseras son los más frecuentes de siniestralidad, por lo que las marcas de vehículos incrementan el costo de compra de los repuestos pertenecientes a estas secciones.
«Cesvi Colombia hace un llamado a la mesura y vigilancia de los costos de reparación de los vehículos porque cuando desbordan ciertos límites el consumidor se ve obligado a buscar alternativas sin criterio técnico, lo cual afecta la seguridad del automotor y sus ocupantes«, expresa el director de la unidad de servicios de Cesvi Colombia.
Fuente: larepublica.co